Una Navidad en color rojo, ese tono tan emblemático navideño que se suma al blanco y verde. Este estilo es para los más tradicionales, aquellos que viven la Navidad con la misma emoción cada año. Para los que reúnen a toda la familia por estas fechas y están deseando recibirlos con una decoración que provoque las mismas emociones en todos ellos. Es la Navidad de siempre, en la que se decora la casa para que todos estén a gusto.